miércoles, 16 de septiembre de 2009

VEINTISEIS


Conocí a Don Steve en la terapia de grupo. El como externo, yo como interno. He de reconocer que la conexión con él fue instantánea y nos hicimos cómplices de todo lo que pudiéramos ser cómplices. Pero esto ya ha pasado de la raya. El señor Steve y yo debemos separarnos, enfadarnos, olvidarnos, en definitiva, cada uno por su lado.
¿Qué de quién es la culpa? Bueno, aún no lo tengo muy claro el tema, pero creo que es de la locura. Si han oído Ustedes bien, de la locura. Esta mañana, después de terapia y de las lágrimas de las almas en pena que acudimos a ella, el Doctor Buy, insigne psiquiatra dónde los haya, nos ha conminado a quedarnos un momento tras la reunión. Y con talante tranquilo nos ha espetado:

- Ya está claro su diagnóstico

Con cara de sorpresa tras años de consulta, pruebas, test y demás zarandajas propias de los esquizofrénicos que creíamos ser, le escuchamos atentamente

- Tienen Ustedes el Síndrome de Mari Pili

A mi la boca me llegaba al suelo, pero Don Steve, que siempre parece saber de todo, le dijo

- ¿Como que síndrome de Mari Pili? ¿Usted realmente cree que nosotros creemos ser mujeres que queremos agradar a todo el mundo, que luchan para ser buenas en cada uno de los papeles que nos ha tocado ejercer durante nuestras vidas, aunque esto implique un desgaste extremo tanto físico como psíquico, y que nos desmoronamos cuando recibimos un mensaje de rechazo o de censura?

Y enfadado se fue dando un portazo

Y a mi que me da que el Doctor Buy tiene razón y no lo quiere reconocer... Quizá nuestra locura es que nos creemos mujeres en cuerpos de hombre. No, nada sexual, no. Hablamos de nuestra alma, de nuestro corazón, de nuestra sensibilidad.

A lo mejor nos hemos vuelto loco el uno a otro... si, creo que es mejor divorciarnos, digo, separarnos. Bueno, eso.



Infiltrado

3 comentarios:

Mar y ella dijo...

Que bueno que conoces a Don Steve,me puedes decir donde le encuentro,anda locamente pérdido y no asoma ni un apice de su nariz...será que ya entro en la vereda de la cordura y fue a buscar a su verdadero amor.??:....si es asi digale que le perdono...pero si no que se prepare lo dejare loco de patio..


Mariella

Gala dijo...

Eso es el sindrome de Mari Pili?
Y yo que a eso le llamaba abnegación.
Ya ves.....
Vaya pareja de locos.

Besos

STEVE dijo...

Lo siento tu, no te conozco, seguro (maldito loquito chivato....)

Un saludo pañero